Hace tiempo que teníamos ganas de probar a hacer algo que el pizzapan lleva en su nombre, la pizza, así que nos pusimos a ello y para hacerla algo diferente compramos mozzarella fresca y la verdad que merece la pena el cambio respecto al típico queso rallado. Nosotros usamos una masa de pizza ya hecha, pero os enseñaré a hacerla desde cero otro día. Así nos quedó la cena de anoche:

Ingredientes:

La masa es bastante larga como para hacerla de un tirón en nuestro pizzapan, por tanto la cortamos en dos, le hacemos unos bordes y untamos la base con la salsa de tomate, a la que le añadimos algo de pimienta.

Vamos añadiendo el bacon en finas tiras y los champiñones previamente escurridos y troceados más pequeños de lo que vienen en la lata.

Vamos desmenuzando el queso y poniéndolo por encima de los ingredientes. Hubiera sido buena idea haberle puesto algo de queso antes de poner todos los ingredientes. También podríamos haber añadido algo de orégano o albahaca, pero no teníamos nada de nada.

Ponemos el pizzapan al mínimo y metemos la pizza encima del mismo papel del que viene la masa para que no se pegue al fondo y hacemos hasta que esté a nuestro gusto. Tenemos que tener cuidado con la condensación del vapor de agua en la tapa que puede hacer que se moje la pizza.